En el municipio grancanario de Mogán, uno de los motores turísticos de la isla, la crisis migratoria que copó portadas entre octubre y noviembre continúa. La imagen ya no es la del muelle de Arguineguín con miles de inmigrantes hacinados tras llegar al archipiélago en cayuco. Ahora están alojados en hoteles, pagados por el Estado y el Gobierno canario, a la espera de que se pongan en marcha soluciones que tendrían que haber llegado antes de fin de año.
La alcaldesa, Onalia Bueno —del partido Ciudadanos para el Cambio—, no ha dudado en emplear las herramientas que tiene a mano para ejercer presión y ha abierto expediente sancionador contra diez hoteles tras denunciar el «negocio» que hay detrás de la… Ver MásFuente : ABC Diario